Algunas ideas muy dispersas para contextualizar esta lista.
No hay síntoma peor en la "apreciación" de la música chilena que la flojera. Siempre he sido defensor de que se hace tanta música en Chile al año, que no encontrar al menos 10 discos nacionales que a uno le gusten al año (o EPs... ¡o canciones!), pasa simplemente por no hacer el esfuerzo por acercarse a los distintos sellos y productores independientes.
Además de esto, creo que la producción musical en Chile se rige por otra lógica, ajena a ese consumismo que actualmente rodea las escenas musicales, en donde pareciera que hay escuchar todo lo que se cruce por delante, armarse rápidamente una opinión y luego, dos días después, escuchar algo nuevo, sin tomarse el tiempo de analizarlo. Acá, tanto los productores, como los periodistas, los oyentes y todos sus intermediarios, han entrado en un proceso de análisis más íntimo y reposado, lo que permite un diálogo más profundo sobre lo que se hace, se dice, se compone y se comenta.
Ahora, bien, cada uno de estos microespacios de producción nacional ha aportado algo al panorama reflexivo/político este año, aunque con distintos matices: algunos desde la producción (si, esto es un acto político, hoy por hoy) y otros desde sus líricas. Ahí están la electrónica experimental (siempre más comprometida), el rock (hoy, lamentablemente, despolitizado como nunca por la sosa neo psicodelia), la música bailable (el interesante tono político que Diamante Records y Discos Pegaos han dado a la música de baile es algo muy interesante), el hip-hop (hoy cada vez más inquieto) y sí, incluso el pop. Aunque este último, no desde las voces más obvias (ni Gepe, ni Mena, ni Anwandter), sino desde la segunda línea del pop, la cual parece abordar la realidad nacional dese una óptica irónica - y por tanto, política - sin caer en cinismos ni facilismos.
Dicho todo lo anterior, y si es que se entendió, estos son los discos nacionales - en orden alfabético - que se contextualizan en lo expuesto.
Bronko Yotte - Con eso te lo digo todo (Dilema Industria)
Deplasticoverde - Mentira universal (Autoedición)
El catálogo de Discos Cetáceos.
El Sueño de la Casa Propia - Doble ola EP (Michita Rex)
Javiera Mena - Primeras composiciones: 2000-2003 (Unión del Sur)
Kinética - II (Dilema Industria)
Matías Aguayo - The visitor (Cómeme)
Matorral - Remoto control (Cápsula Discos)
Nueva Costa - El gran espíritu (BYM Records)
Nueva Órleans - Las caras de la muerte (Autoedición)
Pedropiedra - Emanuel (Quemasucabeza)
Samanta - Teorema (Michita Rex)
V/A - Pegamentos vol. 1 (Discos Pegaos)
Y sí, la foto que encabeza este posteo es del disco que - personalmente - más me gustó este año.
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